Monday, June 16, 2008

LGE: Falta de Coherencia


La nueva Ley General de Educación (LGE), muy controvertida en estos días, plantea un objetivo que es correcto que es elevar la calidad de la educación, sin embargo hay ciertos aspectos que reman en contra de ese objetivo.


En primer lugar esta ley no reduce las inflexibilidades de varios colegios que tienen malos resultados, generalmente municipales y de zonas pobres, para contratar profesores especialistas desde séptimo básico en adelante, no hay que ser experto de educación para darse cuenta que ello es determinante en el aprendizaje en los alumnos y en los resultados del SIMCE muestran directa relación con que el establecimiento tenga o no profesores especialistas.


En segundo lugar la menor exigencia que se les pone a los alumnos para pasar de curso, antiguamente se repetía de curso con 2 ramos rojos a todo evento o con un ramo rojo con un promedio inferior a 4,5. Ahora se establece la repitencia con tres ramos rojos a todo evento, 2 ramos rojos con promedio general inferior a 5,0 y 1 ramo rojo con promedio inferior a 4,5; así es evidente que el incentivo a estudiar se reduce y por ende el aprendizaje es menor, ¿y los niños problema? Bueno existen muchas otras formas de mejorar su aprendizaje viéndolo caso a caso, aunque sea impopular decirlo la única forma de mejorar la calidad de educación es con disciplina y exigencia.


Otro tipo de incoherencia es en el tema de la libertad de la educación, Chile desde hace más de dos décadas ha escogido un sistema de libertades, sin embargo el gobierno quiere a través de las indicaciones distinguir entre la educación pública y la educación privada privilegiando la primera, a través de cuotas de matrícula según se ha planteado (ejemplo 50%) así se pasa por encima de la voluntad de muchos padres que se verán obligados a ir al establecimiento municipal, y si a eso le agregamos que la educación pública plantea entre otros aspectos que sea laica, entonces la familia no puede elegir el colegio de sus hijos de acuerdo a los valores que muchas familias quieren. También es incoherente con un sistema de libertades el hecho que la subvención sea pareja por establecimiento y no diferenciada por niño, eso lleva a los establecimientos a seleccionar niños de bajo riesgo, si fuera diferenciada por niño tendríamos entonces que los establecimientos van a elegir a los alumnos que quieran.


Este último punto nos lleva que incluso exista incoherencia en relación al derecho a la educación, ya que manteniendo la subvención por establecimiento tenemos que los padres de los alumnos de alto riesgo no podrán darles esa educación especial que ellos necesitan y con una muy alta probabilidad, quedarán en la educación pública que es general.
Esto nos lleva a que la calidad de educación no se consigue por medio de una ley sino que con herramientas que se dirijan hacia de ese objetivo, sin embargo las herramientas que se quieren usar van en muchos casos en sentido contrario a lo que queremos.

2 comments:

Javier Bazán Aguirre said...

Los liberticida de la Concertación se enorgullesen de que el Estado supervigile a los privados. Cuando debería ser al revés.
Más socialismo menos libertad.

Pablo Ernesto Vigneaux Wilton said...

Toda idea sobre educación debe estar basada en calidad de educación! para que esto ocurra hay que tener BUENOS profesores (y no plegadores políticos) y buena calidad de información! obviamente las herramientas usadas influyen, pero no son esenciales! cuanto a algún tratamiento diferenciado... apenas lo logro ver para niños con deficiencia o problema... así como el estado que creo debe ser laico! no tiene que influenciar sobre la opción familiar de colegio! ya que una familia puede no ser laica!
en suma... hay mas motivos políticos sobre algunos temas relacionados a la educación que ideas para mejorarla!

Saludos!